Los agudos de Coltrane
|Un estudio muestra la importancia de la forma del tracto vocal al generar notas muy altas en el clarinete o el saxofón
Un grupo de físicos de Australia acaba de resolver un debate con más de veinticinco años de antigüedad. ¿Influye la forma del tracto respiratorio, así como sus movimientos, en la acústica de los instrumentos de lengüeta simple como el saxofón o el clarinete? Para ser más preciso: ¿tienen algo que ver las frecuencias de los armónicos de los muy débiles sonidos generados en el interior de la boca con el tono de las notas emitidas por el instrumento?
Los australianos demuestran que sí, al menos para las notas agudísimas, según un breve artículo que acaban de publicar en ‘Science’.
Para entender la razón de la discusión hay que escuchar un poco de jazz, quizás el ámbito donde con más personalidad han podido manifestarse los intérpretes de clarinete o de saxo. ¿Por qué resulta identificable el sonido de un artista con respecto al del otro? Aquí ya no es sólo cuestión de estilo o de swing o de lo que se quiera decir, sino de otra cosa. Por poner un ejemplo: si todos tocaron o tocan el saxo tenor ¿por qué suenan tan distintos John Coltrane, Stan Getz, Joshua Redman o Joe Lovano? Pueden notarse las diferencias interpretativas, de estilo y de ideas entre un pianista y otro, pero el piano -salvo que sea una patata con teclas¯ suena igual en las manos de cualquiera. El saxofón o el clarinete no emiten el mismo sonido según quien los toque. Los físicos, para su prueba experimental, eligieron el saxo tenor porque su boquilla es lo suficientemente grande para poder instalar los aparatos de registro sin producir estorbo al músico ni distorsión del sonido final.
Con este saxofón preparado, hicieron pruebas de sonido cinco saxofonistas profesionales y tres aficionados.
El registro más importante era el de los débiles sonidos que ocurren en el interior de la cavidad bucal debido a la resonancia de la nota emitida por la lengüeta del instrumento. Pues bien, los físicos australianos demostraron que en las notas altísimas, las más agudas, los profesionales conseguían ‘entonar’ mejor su tracto vocal que los aficionados. Con el movimiento de su laringe y de su lengua -inconsciente pero aprendido después de muchísimas horas de ensayo¯ lograban una mayor fuerza y sonoridad de la nota, que luego se podrá modificar con las llaves del instrumento.
La conclusión científica y solución del viejo debate sobre la influencia del tracto respiratorio en el tono del saxo y del clarinete parece clara. Las resonancias del tracto respiratorio influyen muy poco en el sonido y la afinación en la mayor parte del registro del instrumento. Sin embargo, para tocar notas en la parte más aguda, los músicos deben aprender a afinar sus resonancias respiratorias con las del instrumento.
Aunque sólo lo han demostrado para el saxo tenor, los investigadores creen que el efecto puede ser importante para todos los instrumentos de lengüeta, simple o doble. Y esto implica una lección a los aficionados: que no se desanimen. Para llegar a tocar como Coltrane hay que nacer con una garganta como la suya y estudiar muchísimo.
Fuente: www.nortecastilla.es
hola la nota me pareció buenisima, solo queria hacer una aclaración, humildemente y como pianista, y es la siguiente: donde decis «pero el piano -salvo que sea una patata con teclas¯ suena igual en las manos de cualquiera», en realidad no es tan así, distintos pianistas tocando la misma obra y con el mismo piano pueden hacer que ese mismo piano suene diferente, sobre todo en la musica moderna ( impresionismo o el mismo jaz) donde la forma de tocar, no plana, o sea que cada dedo tiene que tener diferente peso segun el registro del piano en que se este tocando, hace que los armonicos resalten cambiando así el sonido mismo del piano. o sea que la tecnica, el peso y tamaño de las manos, influye en el sonido del piano, a lo mejor no tanto como en el saxo, pero tambien comparaste distintos saxofonistas y esos tambien tenian distintos saxos aunque todos sean tenores, me imagino que sus boquillas tampoco eran iguales. Creo que ningun instrumentista es igual a otro y por mas que te mates imitando a alguien que te gusta como toca, nunca vas a poder tocar como él,ni mejor ni peor, solo vas a ser vos mismo, en la musica no se puede mentir, exiten millones de factores fisicos y psiquicos a la ora de estar tocando y eso nos hace unicos
solo queria opinardesde mi experiencia como pianista. muy bueno el sitio y gracias por compartirlo.
guido, sobre la idea del autor del artículo, mas que nada hace referencia a lo que decis en base a que en el piano, con solo presionar la tecla de do te da el sonido de do, en cambio en instrumentos de vientos eso no pasa dado que lleva una parte de afinación del enterprete.
saludos
che estuvo todo muy bueno pero claramente te falto el tema de los multifonicos
saludos
lucas, si tenés algo de data sobre eso, mandamela que se lo agregamos!
saludos
me parece que si ablamos de agudos y sobreagudos abria que estudiar la garganta de Michael Brecker que dicho y sea de paso no es tenido en cuenta a la ora de nombrar a grandes saxofonistas.
verdad. es cierto. me voy a poner en campaña para armar algo sobre eso.
saludos
hola muy interesante el articulo, pero quisiera que trataran mas el tema de como agudizar y mantene la finacion en el registro audo en un instrumento de lengueta. saludos
hola muy interesante el articulo, pero quisiera que trataran mas el tema de como agudizar y mantene la afinacion en el registro audo en un instrumento de lengueta. saludos
hola muy chevere tu explicacion, pero si quiciera tener mas informacion sobre las notas sobreagudas
entren en el foto del saxo argentina https://www.saxoargentina.com.ar/foro hay hay data y muchos usuarios que los pueden ayudar.
saludos
el artículo es de los mas interesantes que he leido sobre este tema de los armónicos, pero me quedo con las ganas de saber en que consisten las resonancias respiratorias y si estas son inatas o se adquieren con el aprendizaje. Asimismo me gustaría saber si un saxofonista sin esas resonancias respiratorias puede producir armónicos.